Causó la destrucción total de numerosas casas y almacenes de la zona |
339 años del Terremoto de 1684 |
Caracas, 04 de mayo de 2023 |
![]() El 4 de mayo de 1684, a las 8:00 p. m., las poblaciones de Cumaná y Araya se vieron seriamente afectadas por un sismo de magnitud 6,4 que registró una intensidad VIII (destructivo) en la escala de Mercalli modificada, escala que mide los efectos sentidos por las personas del sismo y los daños causados a las estructuras. De acuerdo a los estudios realizados por investigadores de la Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas (Funvisis), el nororiente venezolano ha sido azotado en múltiples ocasiones por fuertes terremotos, baste citar éste de 1684, y sumar los de 1766, 1797, 1853, 1929, el más reciente y fatídico terremoto de Cariaco de 1997 o el de Yaguaraparo de 2018. El Terremoto de 1684 tuvo efectos destructivos en los castillos de Cumaná, Araya, San Antonio de la Eminencia, Santa María de la Cabeza, el convento Santo Domingo, Presidio y Fortín, además de causar la destrucción total de numerosas casas y almacenes de la zona. Al evento se le atribuye una serie de réplicas que conforme a datos históricos, se sintieron por más de 20 días después del evento principal. Con respecto al dato de magnitud de este evento, el ingeniero José Antonio Rodríguez, investigador de Funvisis, señala que “una de las limitaciones de los sismos tan antiguos es la escasa disponibilidad de documentación primaria (documentos y cartas, entre otras). Hay algunos cuya descripción de lo ocurrido limita seriamente la interpretación de los datos. Para este evento, la vía ha sido la interpretación del registro paleosísmico para poner en contexto qué accidente tectónico (falla activa o segmento de ella) pudo activarse para producir este evento”. Las investigaciones paleosísmicas se realizan comúnmente a través de estudios de excavación de trincheras en los que se excava una zanja y un experto investigador registra los atributos geológicos de las capas de roca. Los estudios de excavación de trincheras son especialmente relevantes para las regiones sísmicamente activas, como muchas partes de los sistemas de fallas de Boconó, San Sebastián y El Pilar. Las pérdidas humanas y los daños materiales ocasionados por los movimientos telúricos demuestran la importancia que tiene realizar estudios de amenaza sísmica, por lo que las persistentes tareas de investigación de Funvisis del Terremoto de 1684 permitió la conducción, en 1998, de la excavación de tres trincheras que permitieron analizar el registro paleosísmico, pudiendo atribuirse este terremoto al mismo segmento de falla generador del Terremoto de Cariaco de 1997. La investigación señala que “la ruptura cosísmica afloró por unos 36 km en tierra (entre el Muelle de Cariaco y el Río Casanay, entre los golfos de Cariaco y Paria) y se extendió hacia el oeste hasta el poblado de San Antonio del Golfo, por unos otros quince kilómetros”. Como se indicaba antes, la documentación histórica de este evento es escasa, pero la explorada se basa en una serie de correspondencias dirigidas al Rey de España, donde refiere que la destrucción ocasionada por este terremoto estaría presente hasta el siguiente siglo, demostrando así la precariedad y las dificultades que representaba para la corona española enfrentar la realidad sísmica de sus posesiones coloniales. A este escenario se suman los efectos de la destrucción de Caracas provocada por el Terremoto de San Bernabé de 1641. En conmemoración a este evento, Funvisis recuerda a la población en general, que Venezuela es un país sísmico e insta a las comunidades e instituciones a formarse y estar preparados ante eventos de esta naturaleza y consultar los diversos servicios especializados que ofrecemos en ingeniería sísmica, geofísica, geotecnia, geología de terremotos, servicios sismológicos y prevención sísmica. La planificación es la mejor herramienta para hacer frente a los terremotos; la prevención es la clave. Durante el sismo, debe mantener la calma y cubrirse debajo de una superficie estable. Después de un terremoto, tome precauciones. La fundación continúa difundiendo a través de sus redes sociales, Twitter e Instagram @Funvisis, y su página web www.funvisis.gob.ve, contenidos informativos que contribuyen a la alfabetización del pueblo venezolano de la realidad sismológica nacional. |
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